HACER POLÍTICA PENSANDO EN LOS DEMÁS
Hace pocos días, en nuestra ciudad, un partido político pegó afiches con el nombre de esa fuerza partidaria y su candidato, sobre espacios destinados a la publicidad comercial en la vía pública, como lo es la cartelería lumínica. A este hecho, PROPIN -como agrupación política- lo considera un buen punto de partida para entablar una necesaria búsqueda de acuerdos y consensos a nivel local, entre los referentes partidarios, respecto a las diferentes prácticas proselitistas y su amplia incidencia en lo social, especialmente en este año electoral.
En esta ocasión, empezaremos a dar un primer paso en esa dirección, recordando que la Ley Nº 26.571 denominada “LEY DE DEMOCRATIZACIÓN DE LA REPRESENTACIÓN POLÍTICA, LA TRANSPARENCIA Y LA EQUIDAD ELECTORAL”, en el Artículo 31 correspondiente al Capítulo IV titulado CAMPAÑA ELECTORAL, expresa: “La campaña electoral de las elecciones primarias se inicia treinta (30) días antes de la fecha del comicio. La publicidad electoral audiovisual puede realizarse desde los veinte (20) días anteriores a la fecha de las elecciones primarias. En ambos casos finalizan cuarenta y ocho (48) horas antes del inicio del acto eleccionario”.
Simplemente, si cotejamos el contenido de la citada ley con estos afiches o similares de otros partidos, tanto como los carteles de mayor tamaño de candidatos con un alto presupuesto para la propaganda; estaremos observando casos donde se desoyen las normativas.
Más allá de estas formas de publicidad electoral fuera del tiempo permitido, otro aspecto a considerar es que la necesidad de las fuerzas políticas a expresarse y darse a conocer, no justifican en absoluto, una apropiación irresponsable y perjudicial del espacio público, el cual pertenece a todos los que conformamos esta comunidad. Hacer campaña no justifica ensuciar paredes y espacios de cartelería, tapar otros carteles, utilizar árboles como base de colgantes, llenar de pegatinas las columnas de alumbrado público, etc. Encima, como posible paradoja, algunos candidatos que están a favor de estas prácticas, luego hablarán de temas como “preparar a Pinamar para el turismo”; “la limpieza de sus calles”; “la contaminación visual del medioambiente”; o “el respeto hacia los demás”.
Reiteramos, esta nota que hace alusión a los afiches políticos recientemente pegados, es una crítica con la intención de construir otras formas posibles de expresión política pensadas de manera respetuosa y considerada hacia nuestras localidades y sus ciudadanos. Y para nada significan modos de censura. Por el contrario, el año pasado PROPIN propuso en un proyecto aprobado, nuevas formas democráticas y de pluralidad de canales para la “Presentación de candidatos políticos en tiempos de elecciones”.
Esto indica que siempre hablamos de construir una real convivencia y práctica democrática, donde se sumen otros espacios y renueven las formas participativas, para que desde el respeto y la búsqueda de consensos, se acerquen el político y el ciudadano.
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